miércoles, 26 de mayo de 2010

Defiende Tu Credebilidad, es lo que te define como persona

*Este artículo es mi "Reflexión del Éxito" del boletín mensual "Alcanzando el Éxito #22" publicado en Marzo, 2010 (haz click sobre el link para leer el boletín completo y suscribirte a el) en el sitio: www.exito-motivacion-y-superacionpersonal.com. Espero que lo disfruten.

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Quizás se preguntan como elijo el tema para el boletín "Alcanzando el éxito" cada mes. La respuesta es que trato de escribir acerca de algo personal y trato de convertirlo en una lección de vida no solo para mi, sino también para los miles de lectores.

Como maestro siempre he creído que al enseñar algo, lo estas reforzando para ti también y por lo tanto cada lección también se convierte en un aprendizaje. Por eso los invito a colaborar en este sitio al compartir sus conocimientos en este sitio ya que así ustedes también estarán aprendiendo.

Este mes acabo de vivir una situación en donde resalto el tema de la credibilidad a tal grado que me veo obligado a comentarlo con ustedes.

Desde hace un par de meses estoy involucrado con el equipo de ciclismo de pista nacional como entrenador. Ha sido un trabajo en el cual tengo la oportunidad de contribuir a mejorar el ciclismo, el deporte que amo. Debo reconocer que la actual Federación de Ciclismo ha hecho grandes esfuerzos para rectificar el rumbo, corregir errores y resolver problemas de administraciones pasadas, ya que nuestro deporte ha estado estancado por muchos años y plagado por actos de corrupción y mala organización.

Sin embargo, se ha tomado una decisión que a mi consideración le ha restado credibilidad, la cual ha estado tratando de recuperar a lo largo del último año. Esto es una lastima – pero para mi lo peor de esto es que a) no les importó ó b) no han considerado las consecuencias de sus acciones.

No los voy a aburrir con detalles, pero el resumen es:

El país logro calificar a un ciclista al Campeonato Mundial de Ciclismo de Pista en Dinamarca (comienza hoy, marzo 24, 2010). Entre los involucrados se decidió organizar una carrera selectiva bajo estrictos criterios los cuales fueron aprobados por las autoridades deportivas, jueces y delegados de los equipos estatales. Se decidió que el ganador obtenía su lugar al Campeonato Mundial.

Un joven ciclista de Jalisco resulto ser ganador y por lo tanto fue convocado para una semana de preparación intensa previa al viaje. Sin embargo, a tan solo 2 días de la partida se le avisa que el viaje se cancela por "falta de recursos".

No divulgaré más detalles, pero esto lo menciono ya que es probable que el buen trabajo que se venía realizando se vea afectado por una decisión que sí tenía solución, siempre y cuando hubiera existido voluntad de los involucrados para resolverla.

La credibilidad de esta honorable institución se verá afectada y la próxima vez que se quiera realizar un evento o un proceso justo y transparente esto será más difícil ya que tendrá que volver a luchar en contra de la imagen de una institución no confiable.

Pero aquí viene lo preocupante, y no solo en este caso, sino en la vida (especialmente en los países latinos, a diferencia de los países sajones).

Yo creo que cada vez, valoramos menos el tema de la credibilidad. Nos importa menos nuestra imagen y reputación ante los ojos de los demás, nos importa menos si rompemos nuestra palabra y no cumplimos nuestros acuerdos. Al inicio esta actitud denota arrogancia y prepotencia, pero con el tiempo esto se convierte en desprecio, desconfianza e inseguridad.

La credibilidad es algo sumamente valiosa que nos define como personas (o organizaciones) y si esta es dañada, nuestra posibilidad para escalar posiciones más altas en nuestra vida personal y profesional se verá afectada. No seremos tomados en serio y las oportunidades que estén disponibles serán para los que son considerados más confiables que nosotros. ¿Quien quiere a alguien en su organización en el cual no se puede confiar?

Pero hay otro asunto preocupante para mi... no solo se cuida y se valora menos la credibilidad por parte de quien comete la "falta", sino que los afectados la aceptan con mayor facilidad – nos estamos acostumbrando tanto a decisiones malas, arbitrarias y a veces injustas que simplemente las pasamos y decimos algo como "así es esto".

Los autores de estas decisiones tienen tan poca credibilidad ya, que la gente espera, no que hagan las cosas bien o de manera justa, sino todo lo contrario. Desafortunadamente esto es algo muy común en los países latinos en donde la corrupción, injusticia y desorganización prevalece o simplemente obedece a intereses personales y no a beneficios colectivos para la sociedad.

En nuestros países ya no nos sorprende en lo mas mínimo escuchar escándalos de corrupción, injusticias por parte de los políticos, policías, ejercito, empresarios, medicos u otras personas que deberían tener un alto nivel de credibilidad (como lo tienen en otros países) – nos debería de sorprender y enojar, pero simplemente lo aceptamos. Y si nosotros lo aceptamos les mandamos el mensaje a los perpetradores de estos actos, que esta bien, que lo pueden seguir haciendo y que lo vamos a seguir aceptando.

Quizás no podremos cambiar la credibilidad de otras personas o organizaciones e instituciones gubernamentales, pero sí podemos empezar por nosotros mismos.

Sí podemos ser personas que tenemos credibilidad, personas honestas, personas comprometidas, personas de confianza, personas seguras de si mismas, personas con valores y ética profesional, personas con un alto sentido de la justicia y personas cumplen su palabra.

Todo esto, sí lo podemos ser. Mas bien, lo debemos ser, porque solo así podremos ser agentes de cambio e influencia para otros. Pero recordemos que solo puedo cambiar YO, no puedo cambiar al prójimo, el tendrá que hacer su propio cambio (si es que quiere). Pero sí puedo, y debo cambiar mi propio mundo y generar los cambios que estén dentro de mis posibilidades.

La credibilidad es algo mucho más valioso de lo que la mayoría cree, no caigamos en este error y defendamos a "capa y espada" la nuestra ya que la forma en que nos ve el mundo, es la forma en que seremos recompensados de una u otra manera por el universo de manera en que quisás no podremos entender.

Les deseo el mayor de los exitos.


Anthony W. Cooper
Creador y Admin. de www.E-M-SP.com

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